Pronto se vaciará todo el pequeño cilindro de ti que atomiza tu suéter, que se ha vuelto mi pijama, mi ropa elegante y mi cobija protectora a todo mal. Pronto dejará de enchinarme la piel cada que el aleatorio se le ocurre poner aquella canción, pronto no veré más tu sonrisa antes de dormir y pronto tú olvidarás la forma de mis labios.
Pronto, pronto. El tiempo sé lo lleva todo y no tiene piedad pero por más que pase y por más que arranque, de mi mente tú no te irás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario